NUCA (Óscar Cerezo)
Es ver una sinopsis con la palabra muerte o duelo y ahí voy yo. Me topé en la biblio con este ejemplar de Nuca de Óscar Cerezo y ¡a la saca1. Os describo el argumento.
Nuca es la menor de tres hermanas. En la primera página sabemos que la rubia ha muerto, no hicieron caso a sus padres y se fueron con los patines a celebrar el cumpleaños de Nuca pero ella no se atrevió, y fue la rubia quien lo hizo, y saltó tanto y tan fuerte, el metal contra el hielo una y otra vez hasta que se hundió. No llegaron a tiempo.
"Mi hermana se ahogó en el lado porque no quise ponerme los patines para el hielo. Era uno de diciembre, el día de mi cumpleaños y fue la primera vez que vi al Tiznado. De pie junto a la orilla. Hundiendo la cabeza de la rubia".
Este es un texto regado de culpa, vacío e incomprensión. Esa hermana mayor que expulsa rabia por la boca, una madre de disciplina muy cuestionable que vive derrotada y que se aferra al licor y que, a pesar de todo, es madre por encima de todo y vendería su alma al diablo porque sus hijas no pasaran hambre; una Nuca avergonzada por la espada de la culpabilidad, era ella quien debía haber muerto; un padre que gestiona mal sus horas fuera del trabajo llevando a la familia por un camino complicado; una abuela que cambia de papel cuando ve que todo se desmorona; un buscar refugio en una cueva y toparse con un ogro.
"Era la primera vez que me sentí sola. Pero no la soledad de estar en casa; en silencio. Ni tampoco la soledad que deja la partida de un padre. Sentirse sola no era lo mismo que estar sola. En un bosque donde todos los árboles y todas las hojas son iguales y yo era una hormiga lejos de cualquier hormiguero".
Nuca es una novela de mucho dolor, muerte, tristeza, abusos sexuales, entre otros. Tiene un ligero puntito que me ha recordado a Del color de la leche, mi novela favorita de Nell Leyshon y es que, ambos, se sufren.