"Cuando te venden tantas veces el mundo está enseñándote a prestar atención."
Hay publicaciones a las que no les puede no seguir el rastro. Esto me sucedió con " El ferrocarril subterráneo " meses antes de su salida al mercado en España de la mano de Literatura Random House; quería leerlo. Las recomendaciones eran muy buenas y me picaba la curiosidad descubrir el título con el que Colson Whitehead había recibido el Pulitzer en 2017 y el National Book Award. Hoy os cuento mis impresiones.
Hablar de esclavitud es un tema que a todos nos eriza la piel y nos incomoda; algo, en mi opinión, inexplicable cuando no han pasado tantos años desde que Lincoln la aboliera. Es como mentar cualquier conflicto bélico -¿no fue acaso la esclavitud una guerra entre personas con la tez de distinto color?-
Whitehead nos expone el caso de Cora, hija de esclavos que malvive en una plantación de Georgia (Estados Unidos). Allí crece sometida a la crueldad de sus amos y la marginación y humillación de otros esclavos, y además con la ausencia de su madre, que la abandonó. Un buen día conoce a Caesar, otro esclavo, que le habla del "ferrocarril subterráneo" y le plantea que huyan juntos, del mismo modo que hiciera su madre, buscando su merecida y ansiada libertad.
" Con el tiempo les fueron quitando a palos las palabras del otro lado del océano. Por simplificar, por borrarles la identidad, por sofocar revueltas. Todas las palabras salvo las que encerraron bajo llave aquellos que aún recordaban quiénes habían sido antes. <Las escondieron como un tesoro.>"
No es ni de lejos un camino de rosas. El viaje será primario, a través de túneles y raíles subterráneos que cruzan todo el país, no olvidándonos de su clandestinidad y del riesgo a que asesinasen a toda persona que ayudase a un esclavo a huir, a quien lo ocultase en su casa, alimentase....
El autor nos va envolviendo en la historia, con esa inquietud presente desde el principio de la historia, con la expectativa de que consigan escapar y ser libres por fin. Será muy complicado porque tienen a Ridgeway pisándoles los talones, quien se define a sí mismo como "cazador de esclavos", el mismo que quiere volcar su frustración y su repugnancia con Cora, al igual que la sintiese con su madre años atrás.
El argumento es crudísimo, porque creo que no hay nada más terrible que no poder ser libre, pertenecer a alguien que decida qué y cuánto cuesta tu vida tiene que ser atroz. Es descorazonador. Esta es la historia de una luchadora que hace lo que haga falta con tal de sobrevivir. Y la historia es, a pesar de su dureza, fascinante. Sin embargo, la lectura no ha sido lo que yo cabía esperar. La narración es lentísima, la pluma de Whitehead muy lenta, que se recrea muchísimo en datos y detalles para mi gusto, y que resta intensidad a una Cora que es puro ejemplo de superación.
" No hacer nada equivalía a morir."
La recomiendo, por supuesto, porque como historia no tiene parangón, pero creo que se podría haber aligerado un poco la línea estructural de esta novela y quitarle densidad.
Good review 😊 thanks for your sharing 😊
ResponderEliminarHola,
ResponderEliminarlo tengo en casa desde que salió a la venta y me pasó como a ti, se fue quedando atrás. Lo buscaré para tenerlo a la vista y leerlo cuando tenga un hueco porque me has picado con la reseña.
Un beso, guapa
Me interesa lo que nos cuentas. Tomo nota. Un beso.
ResponderEliminarPues yo para estas lecturas soy cobarde. Algo de refilón leí en El refugio, que había un personaje que ayudaba esclavos a escapar. También estoy leyendo ahora Lo que el viento se llevó pero lo de los esclavos también sale un poco de medio lado.
ResponderEliminarAdemás ya he leído más reseñas que no se han encontrado lo que esperaban, que el tema está pero la forma de contarlo, regular.
Besos
Yo al final no me animé con esta novela, es cierto que me atraía pero por otro lado ciertos comentarios sobre la densidad y condensación de la estructura, cosa que tú también mencionas, me fueron enfriando y al final lo dejé en el olvido.
ResponderEliminarBesos
Las novelas crudas me gustan, nos dan una dosis necesaria de realidad, pero ahora, a punto de dar a luz, creo que no es el mejor momento. La dejo, eso sí, para más adelante ^^
ResponderEliminarCon la claustrofobia que tengo, me he sofocado y todo 🥵😄 ahora justamente he empezado una novela sobre la esclavitud en Cuba y me está resultando duro, creo que no he elegido una buena lectura en estos momentos; este de momento lo aparco pero no lo descarto 😉
ResponderEliminarBesitos 💋💋💋
Pues también yo me fijé en esta novela cuando salió y la descarté poco después por haber leído algún "pero" parecido por ahí, por eso no pasó la criba y me olvide de ella, es una lástima porque a mí el tema que trata me llamaba mucho.
ResponderEliminarUn beso
Lo tengo en la wishlist desde que salió porque también me llamó muchísimo la atención, pero es uno de tantos que apunto (no me da la vida) y ahí sigue... Después de leerte de momento no me animo. Me sigue llamando la atención, pero si es así de lento ahora mismo la verdad es que no me apetece. El caso es que he oído hablar también de otro libro suyo del que dicen algo parecido (Zona Uno", así que está claro que es el estilo del autor. Pues nada, para cuando apetezca :)
ResponderEliminar¡Besote!
En su momento me apetecía, pero después varias opiniones sobre esa densidad y demás me disuadieron de su lectura.
ResponderEliminarBesos.
Me lo anoté en su momento pero después no me hice con él, me lo traes a la memoria, y sigo pensando que lo disfrutaría, siempre teniendo en cuenta esos peros finales que le pones, que ya he leído anteriormente
ResponderEliminarBesos
Entre este libro y el de En estado salvaje, te has marcado dos lecturas complicadas. Creo que este me gusta más que el otro. Me gusta que saques libros que ya tienen un tiempo. Besos
ResponderEliminarNo lo conocía, y al igual que el de En estado salvaje, la trama resulta de lo más atractiva. Aunque el que la narración sea tan lenta me hace dudar.
ResponderEliminarUn beso ;)