"Hace tiempo que el silencio se ha vuelto demasiado espeso a mi alrededor como para que mis gritos de socorro puedan atravesarlo."
Hay veces que la suerte te acompaña; para muestra, un botón. Inquililinas Netherfield organizaron un sorteo en su blog de "Todos los veranos del mundo" de Mónica Gutiérrez (Serendipia, para los compañeros), recién publicada por Roca editorial y chinííííín, ¡fui una de las ganadoras! Os cuento, os cuento.
En primer lugar, tengo casi todos los títulos de Mónica en formato digital pero por unas cosas y por otras, se iban colando en la lista otros libros y aún no me había estrenado con su pluma. Teniendo en cuenta que no soy muy asidua al feelgood, he de confesar que he terminado el libro encantada, con una sensación de "calm vibes" que, si es la finalidad del feelgood, está más que conseguido. Mi sensación lectora es de feelveryveryverygood. Que sí, que me enrollo, así que os cuento el argumento.
Nuestra prota principal es Helena, una abogada barcelonesa que está a punto de casarse con Jofre, juez. Han decidido celebrar su enlace en una ceremonia íntima en Serralles, donde está la casa familiar. Desde que uno de sus integrases faltase no se ha acercado por allí, por lo que el nudo que tiene en la garganta al reencontrarse con su madre y sus hermanos la tiene asfixiada. Espera sobrevivir y salir airosa con su estancia allí.
"No deberíamos magnificar los recuerdos que tenemos de aquellos que ya no están porque corremos el riesgo de engañarnos hasta pensar que solo entonces fuimos felices, que solo aquellas personas nos amaban , nos comprendían y nos hacían sentir bien. Porque no es cierto."
El comienzo es bastante complicado para ella, adaptarse a estar en el lugar donde antes pasaba todos los veranos de su vida, retomar el contacto con su madre y su hermana Silvia es lo que le quita el aire. Poco a poco y según se vayan sucediendo los días, comienza a soltar tensión, a dormir mejor, a relacionarse más, y en uno de sus paseos a los comercios del pueblo, se topa con Marc, su amigo de la infancia. Esto trastocará su programada vida y sus planes a corto plazo.
El pueblo tiene un encanto especial y aún lo supera cuando encuentra una pequeña librería nueva, cuyo propietario, Jonatan, es un peculiar extranjero con un gusto poco convencional en literatura y Helena queda enamorada completamente del lugar. Entabla amistad con él, cumplirán su ritual del té de tarde mientras charlan de literatura y donde ella encontrará absolutos tesoros literarios. Llevará también a visitar la librería a su hermano Xavier, escritor de bestsellers bastante conocio, con quien comparte, como todos nosotros, el amor por las letras.
En general, insisto, y teniendo en cuenta que no soy una ferviente seguidora de este género literario, el libro me ha gustado mucho. Mónica escribe muy bien, de una manera fluida que me ha hecho añorar mis veranos en la casa familiar, y crea un vínculo de empatía con los personajes que es imposible no vivir. La ambientación es estupenda, ya que percibes claramente el olor de las flores, el ruido del agua del río, vives los paisajes con intensidad.... La descripción es muy acertada.
¿Qué decir de la pincelada metaliteraria? Pura mimetización. Yo también querría descubrir esa librería y perderme en ella. El guiño además a grandes autores es un regalo, aunque destaca "Peter Pan". ¿Quién no ha soñado con ser Wendy?
"Quiero dejar de ser tantas cosas a la vez para convertirme solo en una: una mujer con un libro abierto entre las manos, solo eso."
Es el momento perfecto para leerlo, el verano, donde todo ya ha florecido y donde una misma puede reflexionar, reordenarse y replantearse si la vida que lleva es realmente la que le hace feliz. La evolución de Helena desde el primer capítulo hasta el último es muy alentador y realmente reconforta. Ni qué decir tiene que el lazo familiar es envidiable.
"No importa lo lejos que corras a esconderte, la vida acaba por encontrarte."
Lo he leído en dos ratos, ni 24 horas me ha durado, ¿y no vas a llevártelo en tu maleta de vacaciones?
Me alegra que aunque no eres muy de feelgood, hayas disfrutado del libro. Mónica nunca defrauda.
ResponderEliminarBesos
Hola.
ResponderEliminarMe suena este libro de haberlo visto por Goodreads e Instagram pero no me llamaba especialmente, y la verdad es que me has dejado con el gusanillo porque para mí si es de esos libros que acaban por gustarme mucho.
Muchos besos.
Ay, qué ganas le tengo a este libro. Y encima también me ha tocado en un sorteo y no me acaba de llegar a casa, me muero de ganas de leerlo.
ResponderEliminarSi te ha gustado este libro, anímate con otros de feel good de Mónica, ya verás como los disfrutas. Ese toque de personajes estupendos, paisajes en los que quieres quedarte a vivir y siempre un poco de metaliteratura.
Un besote
Yo tampoco soy muy feel good (en mi curro me llaman Miércoles jajaja), pero tiene una bonita pinta para el verano :)
ResponderEliminar¡Muchos besos desde las sombras!
Muchas gracias por adentrarte en las páginas del feelgood. Además me encantan las citas que has escogido. Aunque en ese rinconcito de lectura tan perfecto que tienes, creo que cualquier novela parte con ventaja ;-) Te agradezco mucho la lectura y la reseña, y que hayas conectado tan bien con la intención de la novela. Un beso.
ResponderEliminarMe pasa como a ti, que no suelo leer cosas del género pero es que los libros de Mónica tienen algo diferente. Coincido contigo en todo, en especial en lo bien que sienta la lectura y en cómo te mueve tus propios recuerdos.
ResponderEliminarBesos
Hoy me estoy repitiendo más que una morcilla pero es que no puedo evitarlo cada vez que veo que reseñáis este libro ¡que tengo mucha envidia, que quiero leerlo y que no lo tengo! ¡qué desgraciada soy! ¿Es que no he sufrido ya Bastante? 😅😅😅
ResponderEliminarBesukis 💋💋💋
Paso de puntillas. Me lo llevo a la playita para leer. A ver si llegan ya las vacaciones. Besos
ResponderEliminarA mí Mónica me encanta, así que estoy deseando conocer esta nueva historia. Si te gusto ese punto metaliterario lee su historia de la librería, mi favorito sin dudarlo. Rebosa encanto ;)
ResponderEliminarBesitos
Hola. Esta semana coincidimos con reseña y con impresiones. Yo de este género solo he leído a Mónica y gracias a nuestra compañera Ayla. Lectura ideal para leer este verano.
ResponderEliminarUn beso y feliz tarde.
Hola! Ya leí un libro de esta autora y me gustó mucho. Sin duda este también caerá las próximas semanas, tengo claro que me gustará.
ResponderEliminarBesos!
No es mi estilo. Lo dejo correr (aunque sé que tampoco es el tuyo y ya ves. Jajajaja). Besotes!!!
ResponderEliminarQué bonito lo cuentas. Mónica sabe llevarte a ese lugar especial que te transporta. Seguro que lo leeré antes o después.
ResponderEliminarBesos
Va a caer prontito que lo tengo en la estantería pendiente. Me alegra ver que lo has disfrutado tanto.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me gusta leer los libros bonitos, llenos de reflexiones y esta portada ❤❤❤
ResponderEliminarEs una novela que pinta fenomenal, pero es que ella crea escenarios sencillos y a la vez mágicos. A ver si me hago con él.
ResponderEliminarBesos
Holaa, mira que no era un estilo que conociera pero me ha llamado un montón la atención, eso sí, qué portada tan preciosa, y bueno que tengo intriga por los gustos de este personaje y la biblioteca ja, ja, es como natural tener curiosidad cuando se mencionan estos templos :P
ResponderEliminar¡Beesos! :3
A muchas nos encantaría ir a esa librería jajaja. Ay, ese Earl Grey qué rico tiene que estar
ResponderEliminarBesos
Parece que engancha, eh? Jeje. Lo que me llamó mucho la atención es el título, apetece!
ResponderEliminarBesos!
Ayyyy, pero qué natural eres!. Total, que entraste en él pisando con precaución, pero te gustó. OKis, Muchas Cenkiussss, otro que anoto, aunque no sé si mejor para el ebook. No he leído nada aún de la autora.
ResponderEliminarDesde que descubrí a Mónica soy fan de ella y del género. Tengo este título en mi estantería y estoy deseando leerlo, seguro que, como a ti, me dura un suspiro.
ResponderEliminarUn besín