Se nos olvida ser personas.
Se aleja lo natural y damos la vuelta al mundo, por interés propio.
Se instala lo digital.
Se fueron los cafés, el roce de una mano, mirarse a los ojos y sonreírse.
Se fue la conversación y la carta de puño y letra, y solo quedan letras y su interpretación, libre y siempre equivocada, frías, a lo sumo templadas.
Se marchó el pasear sosegado dando paso a palabras entrecortadas, sin aliento, por auricular.
La prisa.
Se terminó el detalle sorpresa, el envoltorio bonito, el detalle en sí, y se instauró la conveniencia y la obligación; a veces, ni siquiera eso.
Absorbemos la responsabilidad y la convertimos en hobbie, terreno farragoso. Argumentamos falta de tiempo, real o quizá puramente selectiva.
Olvidamos fechas importantes, momentos.
Nos alimentamos de pasado o planificamos un futuro incierto, dejando pasar días sin más, sobreviviendo, no viviendo. El lunes queremos que sea viernes, el viernes domingo, sorteando el tiempo, estrujando las horas.
No somos personas, ni sentimos serlo. Somos números, cosas. Se nos demanda por lo q tenemos y no por lo que podamos ofrecer.
La cara de la moneda ya nunca es doble, a fin de cuentas, ¿para qué? El esfuerzo agota, la pereza es más cómoda. Hay quienes lo llamamos desinterés.
Nos rodeamos de YO evitando NOSOTROS.
Los cabos se van soltando a marcha veloz, a paso agigantado.
Y yo me pregunto....
¿Cuándo fue la última vez que paraste a reflexionar? ¿A sentir? ¿A hacer algo por el mero placer de hacerlo?
Y todo cierto, deberíamos olvidarnos un poco de la tecnología y tan sólo sentir cada momento
ResponderEliminarUn beso!
Yo nunca olvido ser persona y por eso me llevo tantas decepciones en las redes. Mi empatía me hace sufrir pero creo que no soy la única y por ello busco a esas personas que habitan redes. Y las encuentro...
ResponderEliminarPrecioso texto, Esthertxu. Es para enmarcar.
Besitos, querida.
"Se nos olvida ser personas", totalmente de acuerdo. Un beso.
ResponderEliminarHola! Cuanta razón tienes en todo lo que has dicho. Desde hace unas semanas si que he pensado mucho y reflexionado por cosas que me han pasado y empiezo a hacer cosas que de verdad me gustan y sobre todo con la gente con la que más me apetece hacerlo, dejando a un lado todo lo referente a la tecnología y demás. Y espero seguir así por mucho tiempo.
ResponderEliminarBesos!
Me gusta tu reflexión aunque yo sigo buscando el contacto humano,la relación cercana y personal antes que la frialdad de las redes.Adoro tomar café con mis amigas y prefiero llamar por teléfono que enviar un WhatsApp.
ResponderEliminarUn beso
Con este ritmo de vida que llevamos, en el que todo es cada vez más rápido, más de usar y tirar, a veces es difícil no dejarse llevar por esa corriente de prisas, carreras a contrarreloj y deshumanización.
ResponderEliminarLo bueno es darse cuenta a tiempo.
Muy bonito el texto.
Un abrazo.
Me acabo de parar a reflexionar, después de leer tu texto, por qué acabé en las redes. Precisamente por esto, para reflexionar y para compartir conversaciones. Y a lo mejor cafés virtuales, pero es que donde yo vivo hay poco de todo. Incluso donde yo trabajo no hay compañeros, así que esto es un sustituto perfecto que se me olvida en cuanto vuelvo a casa de mi madre y mis horas se llenan de conversaciones reales, de primas a las que siempre me parece que hace mucho que no veo.
ResponderEliminarAhora me voy a un café real, que es la hora perfecta.
¡Besos!
Esa primera frase es para subrayar en fosforito. ¡Qué verdad más grande! Yo no sé si es producto de este caos de vida que llevamos, del estrés o de la sociedad que hemos ido construyendo. Pero los pequeños detalles se han esfumado, ahora ya no se valoran...ahora todo es lo material, el dinero, y nosotros mismos.
ResponderEliminarNo sé si viene a cuento o no, pero el otro día vi un señor mayor en un supermercado preguntando por determinadas cosas que no sabía dónde estaban y la empleada le respondió rápido, sin prestarle mucha atención...cuando se veía que el hombre no podía moverse bien (andaba ayudado de dos muletas). A punto estuve de ir a por lo que necesitaba yo misma, pero luego me di cuenta de que iba con una señora. Voy al hecho de que no se piensa en los demás, en si esa persona nos necesita o no. Nos hemos inmunizado del mundo y solo pensamos en nosotros.
Besitos guapa, ¡¡¡viva la Esther reflexiva!!!
Es verdad que no somos personas, somos números.
ResponderEliminarUna entrada muy reflexiva.
Un besazo.
Yo no necesito una moneda para decidir a cara o cruz si quitarme el sombrero antes este escrito. Mi mas sincero reconocimiento por compartirlo. Me encanta y espero que aunque sea un poquito, una miajita nada más como decimos por aquí cale en la gente. Gracias
ResponderEliminarTienes más razón que un Santo. Vaya zasca nos has dado para que pensemos y empecemos a valorar a algunas cosas. Y es que las horas se nos comen con el trabajo y alguna cosilla más como la casa, y si ya nos queda poco para los hobbies imaginate si nos dan un móvil.
ResponderEliminarQue buena reflexión.
B7s
Ali - Entrelibrosycoletas ♥
Un texto para no olvidar ser personas. Muy cierto todo lo que dices, cada vez se nos olvida más el vivir y compartir por ir con prisas y sin dedicar tiempo a quienes lo merecen. Una vida en la que predominan las cosas a las personas, por desgracia.
ResponderEliminarGracias por la reflexión, guapa!
Besos
Qué voy a decirte que no sepas? :-P
ResponderEliminarCasi me siento culpable por ser el terror de las fechas.
En todo caso, querida, a veces pasa justo lo contrario
Besos
Cuántas verdades! Y qué bien escrito además. Para enmarcarlo en un sitio preferente de la casa y recordar estas palabras todos los días.
ResponderEliminarBesotes!!!
Una gran reflexión y muy cierta, la tecnología nos ha envolvió de tal forma que aveces olvidamos que a nuestro alrededor hay personas, naturaleza, lugares, acontecimientos que merecen que los vivamos, si estar con la cabeza gacha mirando un celular o tablet.
ResponderEliminarAfortunadamente, todavía quedamos algunas que no somos presas de tanta tecnología y nos gusta más compartir momentos "tocando carne". Aunque tengo que reconocer que cada vez somos menos y el grupo de los que no andamos mirando el móvil mientras charlamos del tiempo una especie en extinción.
ResponderEliminarBs.
Hola!
ResponderEliminarCuanta razón tienes... gracias por hacernos reflexionar.
Un beso
Hola
ResponderEliminarMuy de acuerdo con esas palabras. Más de una vez comento con mis conocidos que echo de menos tiempos antiguos...
Besos.
Es fácil ¿verdad? dejarnos arrastrar por la tecnología y sufrir casi un colapso si salimos un día de casa sin móvil, por ejemplo. Pero me ocurre también todo lo contrario porque sin contacto humano no soy nadie. Te contaré una anécdota de este sábado pasado, yo uso tanto el teléfono que la batería me dura un suspiro, pues bien, durante todo el puente pasado que he tenido a mis hermanos y sobrinos de visita en Madrid y especialmente el sábado ni me he acordado del cargador. El sábado me sorprendí al llegar a casa porque salí por la mañana con 90% y volví por la noche con 75%. Es una chorrada, pero ilustrativa ¿no? (Por cierto, pasé un día fantástico)
ResponderEliminarHola cielo:
ResponderEliminarLa verdad es que este texto tiene mucha razón, creo que se nos esta olvidando vivir de una manera muy rápida. Ahora todo es a través de otras cosas, lo natural es a día de hoy lo más extraño.
Gracias por tus palabras !
Un beso infinito ♥
Precioso, me ha encantado, hay que vivir los momentos y el ahora porque mañana no sabemos donde vamos a estar y ser personas y ver que el resto también lo son. Un abrazo
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Verdades como puños. La importancia del instante, del contacto físico, de lo natural, de los pequeños detalles...
ResponderEliminarUn beso, feliz finde ;)
Que bonita reflexión aunque en mi caso he tenido mucha necesidad de pararme y decir hasta aquí porque tan majo es siempre pensar en “yo” en lugar de nosotros que al contrario . He entendido que hagas lo que hagas lo bueno lo olvidan y están pendientes si un día fallaste y no lo hiciste , eso se recuerda mucho más , practiquemos un poco el ponerlos en el lugar del otro y cuanto mejor nos iría todo , si uno no está bien para si no lo estará para los demás . Un beso enorme .
ResponderEliminarTienes mucha razón, mi querida amiga. muchas veces me paro a pensar en ese tipo de cosas, quizá los más jóvenes no reparan tanto en ello porque no conocieron los tiempos sin móviles, sin internet, sin prisa, sin esa continua competición, sin postureo... yo soy de las que escribía cartas por correo postal en verano a los amigos cuando se iba de vacaciones al pueblo, de llamar al teléfono fijo para quedar el finde, de tirarnos en un parque a hablar y mirarnos a la cara mientras comíamos pipas o cualquier otra cosa, de echar el rato con juegos de mesa, de prestarnos atención sin que nos desconcentrara un pi pi pi que salía del bolsillo... en fin, cada vez perdemos más nuestra nuestra humanidad, lo tengo más claro, ahora solo nos preocupamos de aparentar, de competir deslealmente por ser más y mejores. No nos importan las personas, ni los sentimientos, ni el dolor ajeno, ni nada que no sea nuestro ombligo y es triste muy triste porque al final, somos nosotros mismos los únicos que podemos empezar a cambiar todo esto. Muy buen post, Esther. Un abrazo
ResponderEliminarMucha razón. A veces se busca en las redes lo que no encuentras en tu día a día y esos cafés virtuales son los que sustituyen a los reales. Hay muchas circunstancias y muchas razones, pero lo que nunca debemos olvidar que somos personas.
ResponderEliminarUn gran abrazo
Nooooo!!! No estoy de acuerdo. Bueno, solo un poco, especialmente en lo de la falta de tiempo y en la sensación de que a veces no te ven como persona. No hay que perder de vista lo realmente importante, lo que enumeras por ejemplo. Lo virtual solo para solventar la lejanía y poco más. Y bueno, me siento afortunada, porque sí que valoro y sigo disfrutando de esas miradas y sonrisas cómplices, del café, del detalle y de muchas cosas más. Vamos, que pienso y quiero pensar que es al contrario, y excepcionalmente, sucede lo que dices. Un besote.
ResponderEliminarPD: no saco ningún palo por lo de Dickens. A mí me encantó y de hecho he picado el anzuelo otra vez con esas ediciones especiales hechas con tal objetivo, pero te entiendo. Ya te diré yo dos o tres clasicazos con los que yo...ni frío ni calor...
Dejo ya de enrollarme ¿Ves? Este comentario virtual en diferido compensa el café que no nos podemos tomar XD
Hola amiguit CUANTA RAZÓN LLEVAS TENGO YA VARIOS MESE HACIEDOME SAS MISMAS PREGUNTAS DE HECHO ME HE ALEJADO DE LAS REDES un poco canada de la virtual y al volver a lo estudios me olvide que tenía una vida real alla afuera este año me he propuesto compartir con mi hija mas a manudo le popue una o o dos por semana hCER
ResponderEliminarhacer
JUEGOS DE MESA Y ME HA DICHO QUE SI ESTE teclado ES DE LOCOS NO ME DEJA ESCRIBIR COMO QUIERO , ME encanto tu reflexión besos desde mi brillo del mar
muy acertada reflexión
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