La novela que traigo hoy ya es muy conocida por todos, por estar en el candelero literario. Esta es "Me llamo Lucy Barton", de la escritora Elizabeth Strout, con el sello de Duomo Ediciones.
He de reconocer que estaba puesta en preaviso de que no me iba a gustar. Una que es cabezona o la curiosidad le mata a ella, y no al gato, y sumado a la entrevista a la autora en el programa Página 2, que me rechifla, hizo que finalmente me animara a su lectura.
Nos encontramos con una novela de poco más de doscientas páginas, acontecida durante cinco días y cinco noches en un hospital de Manhattan. Dos protagonistas forman parte de este argumento; Lucy, una mujer casada, madre de dos hijas, que se encuentra hospitalizada; y su madre, una mujer singular y parca en palabras, que decide acompañar a su hija durante su estancia en el hospital.
Madre e hija hace muchos años que no se ven, a tenor de alguna llamada teléfonica muy aislada a lo largo de todo ese tiempo. Presentes están los recuerdos de ambas, la infancia de Lucy, el punto de vista de una y de otra. La preocupación de Lucy por sus hijas, la falta de apoyo por parte de su marido, sus temores, sus hobbies, su amor por la literatura, se irán narrando de forma breve y no muy detallada.
Por norma general una relación maternofilial conlleva un sentimiento de unión y amor puro y nítido. Era mi expectativa cara a estas páginas, encontrar emoción, a pesar de que esa relación fuera nefasta. Hablamos de una novela que destaca por los silencios, por las posibles reflexiones que aporten a posteriori. Y es lo que realmente no he conseguido entender. Una historia que me ha parecido lineal, sin sobresaltos, un tanto anodina y carente de lo que me hubiera gustado sentir, convirtiéndola en una lectura irrelevante para mí, que me ha hecho estar incómoda.
Insisto, quizá yo no haya sabido apreciarla, impulsado seguramente por el lazo tan fuerte que considero existente entre una madre y su hija, y a la contra, de una hija para con su madre. Esperaba haber sentido en mi piel calambres al leer a ambas, llorar de pena, empatizar con una o con la otra, sufrir crudeza, miedo, comprenderlas, vivirlas. Me hubiera satisfecho por parte de Strout unas letras que ahondaran más en el alma.
No ha sido así, no me ha aportado nada. Puede que incluso un giro al final del libro me hubiera provocado una valoración más favorable. Sin embargo, solo puedo catalogarla como sosa y no recomendarla.
Solo me alegro de haberla leído por saciar la curiosidad que me provocaban sus críticas, nada más.
He de reconocer que estaba puesta en preaviso de que no me iba a gustar. Una que es cabezona o la curiosidad le mata a ella, y no al gato, y sumado a la entrevista a la autora en el programa Página 2, que me rechifla, hizo que finalmente me animara a su lectura.
Nos encontramos con una novela de poco más de doscientas páginas, acontecida durante cinco días y cinco noches en un hospital de Manhattan. Dos protagonistas forman parte de este argumento; Lucy, una mujer casada, madre de dos hijas, que se encuentra hospitalizada; y su madre, una mujer singular y parca en palabras, que decide acompañar a su hija durante su estancia en el hospital.
Madre e hija hace muchos años que no se ven, a tenor de alguna llamada teléfonica muy aislada a lo largo de todo ese tiempo. Presentes están los recuerdos de ambas, la infancia de Lucy, el punto de vista de una y de otra. La preocupación de Lucy por sus hijas, la falta de apoyo por parte de su marido, sus temores, sus hobbies, su amor por la literatura, se irán narrando de forma breve y no muy detallada.
Por norma general una relación maternofilial conlleva un sentimiento de unión y amor puro y nítido. Era mi expectativa cara a estas páginas, encontrar emoción, a pesar de que esa relación fuera nefasta. Hablamos de una novela que destaca por los silencios, por las posibles reflexiones que aporten a posteriori. Y es lo que realmente no he conseguido entender. Una historia que me ha parecido lineal, sin sobresaltos, un tanto anodina y carente de lo que me hubiera gustado sentir, convirtiéndola en una lectura irrelevante para mí, que me ha hecho estar incómoda.
Insisto, quizá yo no haya sabido apreciarla, impulsado seguramente por el lazo tan fuerte que considero existente entre una madre y su hija, y a la contra, de una hija para con su madre. Esperaba haber sentido en mi piel calambres al leer a ambas, llorar de pena, empatizar con una o con la otra, sufrir crudeza, miedo, comprenderlas, vivirlas. Me hubiera satisfecho por parte de Strout unas letras que ahondaran más en el alma.
No ha sido así, no me ha aportado nada. Puede que incluso un giro al final del libro me hubiera provocado una valoración más favorable. Sin embargo, solo puedo catalogarla como sosa y no recomendarla.
Solo me alegro de haberla leído por saciar la curiosidad que me provocaban sus críticas, nada más.
A mi tampoco me dijo demasiado, la verdad. Considero que la parte interesante que era la madre se queda muy en el aire y acabo hasta la moña de estas novelas en las que parecen primar los silencios y yo siento que lo que sucede es que al autor le falta valor para enfocar adecuadamente la conversación que todos esperábamos y que jamás sucedió sin tener claro de todo el motivo.
ResponderEliminarMucha ventanita, en definitiva
Besos
Buenas mi querida amiga, me encanta volver verte por aquí y leer entradas tuyas. Me gusta tu manera de hacer reseñas, eres exigente con los libros porque se ve que te encanta leer y que esperas que las letras te emocionen, te hagan sentir, que te lleguen porque para eso nos adentramos en las historias, queremos vivirlas y decepciona bastante cuando son insulsas y sin ninguna gracia. Nos leemos pronto, corazón, un abrazo muy fuerte
ResponderEliminarHola Esther
ResponderEliminarPues mira, como tú, había leído de todo. Se agradece tu sinceridad, y asi has comprobado, en parte, que coincides con muhcas opiniones. Una pena...Yo la dejaré pasar.
Besos.
Hola! Yo lo empecé con muchas ganas y conforme fui avanzando la decepción era mayor. El que se fuese saltando de una cosa a otra no me permitió engancharme a la historia y lo que más interesante me parecía, que era su relación con su madre, se pasó muy por encima.
ResponderEliminarEs bueno que lo hayas leído, sé de personas que este libro les ha encantado, así que de esta manera has podido salir de dudas, jejeje.
Besos!
Hola guapa! Como te comenté no hace mucho a mí no me gustó nada. Coincido en todo lo que dices.
ResponderEliminarUn beso!
Que pena aunque ya te imaginabas que no te iba a gustar.
ResponderEliminarA mi si que me gustó a pesar de esa frialdad. Desde luego no es la típica relación madre-hija. Y si me quede con ganas de saber más cosas de la madre, tiene que haber una razón para que sea tan despegada
Besos
Lo tengo pendiente, a ver si me animo pronto a leerlo :)
ResponderEliminarA mí sí me gustó esta novela. Podría decir que me gustó todo de ella, los temas que aborda, la narración contenida e intimista, los silencios que dicen tanto o más que las palabras... Pero está claro que no a todos nos puede gustar lo mismo, afortunadamente :)
ResponderEliminarBesos
Pues en vista de cómo lo pones, no creo que lo lea.
ResponderEliminarBesotes!!!
He leído muy buenas críticas sobre ella y alguna negativa, pero tal como lo cuentas, no me hace pensar en ella como algo que tengo que leer.
ResponderEliminarBesos
Yo también esperaba encontrar más emoción y sentimiento entre sus páginas, y más amor que es a lo que hace referencia su autora en la entrevista en Página dos...pero no me transmitió eso. Aunque sí que me gustó la visión positiva de cómo Lucy consigue superar toda su infancia y cómo esta la determino a ser así.
ResponderEliminarBesitos
Hola!
ResponderEliminarCuando lo empecé esperaba lo mismo que tu, lo que viene siendo una relación madre-hija vaya... a medida que avanzaba me pareció que era más importante lo que solo se dejaba entrever.. aún y así quedé bastante confusa igualmente xD
un beso!
Yo soy e las que si la disfrutaron y mucho. Me gustó esa narración intimista, y esos silencios que tanto me transmitieron. Pero aquí está lo bueno de la literatura, los puntos de vista opuestos y poder compartirlos.
ResponderEliminarUn beso ;)
Ni lo intenté, Esther. Mi profe de crítica literaria no entendía las buenas críticas de esta novela. Pero había demasiado marketing y publicidad positiva tras esta obra. Me revienta un poco que hagan esto y que luego seamos los pobres lectores los que tengamos que excusarnos diciendo que no la entendí o no era mi momento.
ResponderEliminarBesitos.
Por ahora la verdad es que no tenía intención de leerla, pero que lástima que no te haya convencido y te resultara sosa.
ResponderEliminarY se agradece la sinceridad ^^
Besos!
No acaba de llamarme esta novela y después de lo que cuentas menos todavía. Gracias por tu reseña, un beso
ResponderEliminarBueno cada uno es cada uno. Además siempre es bueno tener otro punto de vista. Yo lo tengo pendiente de lectura. A ver si puedo hacerle hueco pronto y ver qué me depara. Besos
ResponderEliminarEsta claro que para gusto los colores y a mi ciertas opiniones me la pusieron tan triste que no me atrevía a leerla.
ResponderEliminarNo creo que no la hayas sabido apreciar. Es que cada uno tiene sus gustos y a cada uno le llenan diferentes cosas. A mí sí que me gustó, mucho, mucho, más de lo que yo misma esperaba. Un besote!
ResponderEliminarYo esta novela la he descartado.
ResponderEliminarA mí ni me influye el márketing ni la publicidad, pero de lo que sí estoy absolutamente convencida es que sí me influyó definitivamente en mi disfrute al leer esta novela fue mi bagaje personal.No voy a contar mi vida, pero las relaciones madre he hija a veces no son perfectas.
ResponderEliminarUn beso
Hola amiga me alegró un montón volver a verte, ahora estoy estudiando me he es mas complicado pero me alegré de ver tu huella, la verdad no lo he leído te digo mas tengo tiempo que no leo , ahora estoy volviendo a leer con mas calma, L Catedral del Mar, la primera vez no la leí bien y la tenía aparcada, , gracias a tu reflexión la leeré, un beso desde mi brillo del mar
ResponderEliminarMm no estaba segura de qué hacver con esta novela....pero vaya no me dice mucho y creo que me acabaría pasando como a ti.
ResponderEliminarUn beso!
Es una pena que no haya sido una gran lectura por todos esos detalles que comentas, aunque la suerte es que ibas preparada para ello. Yo de momento tampoco creo que le de una oportunidad, no creo que sea una lectura para mí.
ResponderEliminarUn beso ^^
Hola preciosa,
ResponderEliminarCafe en mano y un ratito libre me paso a leerte.
Tengo este libro que me llego como regalo de Bookeando con Mangeles, no me he puesto con el aún, porque no leo mas que nada, mi tiempo es limitadisimo y tengo que elegir de poco a poco, me enamoro su portada, me llamo a voces, y la rubia me lo puso al alcance de mi mano. Voy a leerlo enseguida, me he quedado un poco parada al leerte, pero se agradece siempre la sinceridad, bajo mis expectativas y lo afrontare con cautela y menos pasión.
Un besote
Desde que se anunció su publicación me llamó mucho la atención, y poco a poco fui leyendo algunas reseñas que rebajaron mis expectativas. Finalmente se lo regalaron a mi hija, y de momento ni ella ni yo nos hemos lanzado...a ver si me decido y te cuento ;)
ResponderEliminarGracias por tu reseña. Besos
¡Hola!
ResponderEliminarQue pena que no te haya gustado :( A mi me llamaba bastante pero leyendo la reseña mejor lo dejo pasar.
Un besico
Tu reseña me causa aún mas intriga si cabe. La tengo pendiente así la leeré si o si. A ver si a mi me causa indiferencia o me despierta más emociones.
ResponderEliminarUn beso
No había leído tu reseña, Esther. Me alegro por descubrir que no estoy sola en esto de que no me haya gustado. No entiendo esa avalancha de crítica en prensa de que llega la "novela imprescindible" por aquí, que si "escritora fantástica" por allá, y luego NADA DE NADA. Yo también la reseñé y mis impresiones van en la misma línea. Es tediosa, aburrida hasta la desesperación —así lo dejé escrito, o algo parecido, vaya—...Me gusta saber que hay quien la ve con mis mismos ojos. Saludos de letras. Carlota.
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