Robado

Formato digital, 0,99 €
Alejandro Capparelli
67 páginas.

Lautaro tiene un pequeño defecto físico. Nada grave, aunque se esfuerza por ocultarlo. Sin embargo es su seña de identidad. Una marca que le permitirá saber que no nació como le contaron. Para llegar a la verdad tendrá que superar las carencias que le dejó la sobreprotección maternal.

Fernanda no pudo volver a tener una relación duradera después de que Mateo desapareció. Tras varios fracasos, necesita deshacerse de esa imagen idealizada. El problema es no tener la opción de encontrarse con él.

Alejandro Capparelli, nacido en Montevideo, Uruguay (1979). Actualmente vive en Madrid.  Publicó un libro de Marketing para Escritores titulado "Edición indie. Cómo ser un escritor independiente".

Además colabora en el proyecto editorial de varios autores independientes desde su blog edicionlibroindie.com. Robado es su segunda publicación.

Lautaro es un chico acomplejado por un defecto físico, le falta un trocito de una de sus orejas. Hará todo lo posible por tapárselo y pase desapercibido, en parte por sufrir la crueldad de sus compañeros de colegio de forma constante. A raíz de esa “tara”, descubrirá algo que le cambiará la vida, y valorará cómo afrontarlo.

" Logramos lo que queremos cuando aún no estamos preparados para tenerlo."

Fernanda es una profesora que termina una relación sentimental con otra persona porque no termina de sentirse plena. Vive con el recuerdo de Mateo, con quien tuvo un pasado. Quizá el hecho de no despedirse de él le siga atormentando en el presente.

"Todos en algún momento nos enfrentamos a una revisión del pasado. A todos se nos derrumban las certezas tarde o temprano."

Hablamos de una novela de 67 páginas, lo consideraremos como relato, por lo que no quiero contaros mucho más sobre ella para no spoilear. 

Está narrada por dos voces (Lautaro y Fernanda), en primera persona, en dos tiempos diferentes, de manera que se irán intercalando los capítulos de ambos.

Es evidente que la historia de Lautaro y Fernanda se fusionan en algún momento. El secreto que descubre Lautaro, o mejor dicho, le hacen descubrir se conoce desde el principio, prácticamente. He de reconocer que mi astucia fracasó estrepitosamente, porque di por hecho cuál podría ser la vivencia de Fernanda, y me equivoqué. Por esta parte, me ha gustado, me ha sorprendido.

Lautaro es un chico maduro y fuerte que solo necesita cariño y respuestas. La vida le hará pasar tragos muy amargos. Por su sensibilidad me he visto más involucrada con él. Fernanda es una mujer que no consigue seguir adelante por las atrocidades de las que tuvo que aprender cuando aún era demasiado joven. Hablamos de un trasfondo duro de - lamentablemente -  historias que conocemos en la actualidad y que tienen mucha miga. Por ello creo que está descrita de manera atropellada, muy directa y escueta para mi gusto. Considero que de haber estado un poco más mimado en los detalles, hubiera sido más extenso y habría podido ser un novelón de los que se te meten por dentro y es difícil desprenderse. Quizá me ha sabido a poco, insisto, porque la línea argumental es magnífica y preciosa; sin embargo, pierde fuerza al mezclar de forma tan brusca cada parte, faltando matices que lo podrían haber dejado mejor hilado. Quizá por eso, y a pesar de que el final es concluyente, me he quedado con un sabor de boca agridulce.

Este libro me tocó en el sorteo de Laky (Libros que hay que leer) para el mes temático de Octubre: Novela autopublicada. En primer lugar, muchísimas gracias a Alejandro por habérmelo enviado tan rápido. 

En segundo, siento el retraso en publicar esta entrada en Noviembre y no el mes pasado.